sábado, 26 de septiembre de 2009

CALMA INCOMODA


El recuerdo se enreda en las comisuras de la boca
anudándose en la lengua,
ahorcando la garganta,
silenciando cada voz.
La duración no es más que este ovillo de memoria
en este instante,
esta madeja urgente
que ruega ser el abrigo de un tiempo helado.
Presente alado de un pasado en cierne
de un futuro fugitivo.
Caracolas y pájaros asisten a la celebración
del encuentro entre arándanos y magnolias.
Donde, al fin cómodos, los cercos del tiempo
abren paso a los vientos,
para arrasar con su influencia
estas letanías.

2 comentarios:

Lord Goring dijo...

inspirado como siempre amiga, interpretas el cosmos primordial y sus efluvios subjetivos y multidireccionales como pocos... Besos del mas allá, donde ardiles reina, y caruso Jamás dirigirá a racing!

Fedra dijo...

Uy! Cuanta poética desbordando esta poesía, pareciera como si las palabras quisieran escapar, muy hermoso. El tiempo y lo eterno